La mitad occidental de la zona de la Montaña está ocupada por el extremo oriental del sistema vasco-cántabro de
montañas, que son sierras que corren en dirección este-oeste, de moderada altitud y que en ocasiones forman
verdaderas altiplanicies; se trata de las sierras de Aralar, Andía, Urbasa, Lóquiz y Codés, cuyas principales
elevaciones son: Irumugarrieta (1.430 m), Beriain (1.494 m), Dulanz (1.239 m), Sarzaleta (1.114 m) e
Ioar (1.414 m). Los valles confinados entre ellas también siguen la misma dirección este-oeste y de norte a sur
son los siguientes: Barranca-Burunda, Améscoas, Val de Allín y Valdega.
Por último el extremo norte de la Montaña está ocupado por los montes de la vertiente cantábrica. Sus principales
alturas son Auza (1.305 m), Iparla (1.049 m), Legate (870 m), Mendaur (1.131 m), Erakurri (1.142 m),
Mandoegi (1.046 m), Peñas de Aia (832 m) y Larrun (900 m). Aunque estos montes presenten una altitud moderada,
es una zona con un relieve muy encajado, cuyas diferencias de cota entre los fondos de los valles y las cumbres
antes citadas en ocasiones supera los 1.000 m. Dada la complejidad del substrato geológico, los valles que ocupan
estas zonas, tienen distintas orientaciones aunque siguen una dirección general norte-sur. De este a oeste
encontramos los valles de Luzaide/Valcarlos, Baztan, Malerreka, Bortziriak/Cinco Villas, Urumea, Leitzaran y Araitz.